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"Escritor es quien se gana la vida escribiendo". A mi... solo me gusta escribir, ... necesito escribir. ¿Si me leen? Alguno hay que se aventura. ¿Eres tú uno de ellos?

viernes, 11 de junio de 2010

Exilio republicano


Ayer, 10 de junio de 2010, hice la última excursión del año. Con cuarto de ESO hicimos una salida (repetida ya por tercera vez, siempre con el mismo curso) que conocemos como “La salida de Guerra Civil”: MUSEO DEL EXILIO, en La Jonquera; CAMPO DE REFUGIADOS DE RIVESALTES, al norte de Perpignan; y lectura de poemas de poetas exiliados o asesinados ante la tumba de Machado, en Cotlliure.
El primer año que visitamos el campo de Rivesaltes, los responsables del “Conseil du Roisillon” nos mostraron un interesantísimo proyecto de MEMORIAL en reconocimiento a todos aquellos que sufrieron aquel paisaje. Ayer tres años después de aquella visita, el páramo abandonado en que se ha convertido sigue igual.
Élodie Montes, nuestra guía, me explicó que hacía pocos meses que había visitado, en Corbera D’Ebre, “115 días”, principal centro de interpretación de la batalla del Ebro. Su emoción tenía muchos orígenes: la composición de las exposiciones, el montaje audiovisual, pero, sobre todo, el consuelo de los recuerdos familiares, ya que el hermano de su abuelo, miembro de las brigadas internacionales, había muerto en aquellos paisajes. Después de su visita todavía entendía menos las trabas que pone el Gobierno Francés en la realización del proyecto de Rivesaltes. La explicación es más fácil de lo que parece.
Francia se enorgullece de su heroísmo ante los nazis en la Segunda Guerra Mundial, es por eso que, con motivo del 60 aniversario del final de la contienda, desarrolló un puñado importante de proyectos en los puntos más calientes de su victoria ante los alemanes: museos, centros de interpretación, monumentos, audiovisuales espectaculares, etc. El arco geográfico se ajustaba a los decorados del arriesgado desembarco de Normandía. Pero Francia no se sentía orgullosa de Rivesaltes (como no se siente orgullosa de campos similares).
A lo largo de estos últimos 70 años, Rivesaltes ha cumplido varios cometidos, y ninguno enorgullece al gobierno francés: campo de refugiados de exiliados republicanos españoles (de finales de 1939 a finales de 1942); de concentración de población judía con destino al campo polaco de exterminio de Auswitch (hasta el final de la segunda Guerra Mundial; campo de concentración para la población argelina adepta a la metrópoli francesa en la guerra de independencia de Argel (años 60) cuando esa población (des “arquis”), que había luchado a favor de Francia recibió, como “premio” a su fidelidad, una estancia “gratis” en aquellas dependencias; y hasta hace pocos años, como centro de internamiento de inmigrantes ilegales, cerca del aeropuerto de Perpignan con el objetivo de su repatriación.
De todos esos cometidos, ninguno enorgullece al Gobierno Francés; porque, por ninguno de ellos puede sacar pecho. Ese es el motivo de que no se haya movido ni una piedra. Con todo, Élodie me comentó que ya habían conseguido los permisos de obras y que ahora, además de la financiación (¡malos tiempos!) necesitaban el visto bueno de los ecologistas que alegaban la existencia de tres especies autóctonas necesitadas de protección.
Mi pregunta se hace obligada. El próximo final de curso, cuando vuelva a homenajear a las víctimas del exilio republicano visitando de nuevo la Jonquera, Rivesaltes y Cotlliure, ¿encontraré alguna piedra en su nueva ubicación? ¿Se habrá empezado de una vez el reconocimiento francés al trato despreciable que se dio al más de medio millón de refugiados republicanos que cruzaron su frontera en busca de un consuelo amable, y solo se encontraron con el batir de la tramontana en las playas de Argelés entre el alambre de espino y las olas?
Siento darle la razón a Élodie, supongo que no. De todas maneras, yo seguiré paseando entre las piedras desnudas de aquel campo emocionándome con cada uno de los recuerdos encerrados en sus silencios.

1 comentario:

  1. La palabra "republicano" me parece demasiado generica, supongo que habría de todo, republicanos convencidos, otros a los que le "tocó" el republicanismo involuntariamente otros que lo único que pretendian era parar a Franco en el Ebro sin ninguna intención de reconquistar España para la república y quedarse ellos con el "Estat Catalá", tambien habría miembros, imagino" de eso que se llamó "El frente popular" y que fué una de las experiencias mas nefastas y terribles de la historia de España.
    En cuanto a que Francia deba crear o restaurar monumentos en memoria u homenaje a estas personas pues depende de que personas como le he dicho. No obstante le recordaré que tampoco hay en España nada que recuerde la memoria de José Bonaparte que fué bastante mejor gobernante que que esa herida lacerante que fué Fernando VII y al que si damos honor y gloria, será quizas simplemente que no eran de allí y eso, aquí, allá y en todas partes es por desgracia lo único que cuenta.

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