Sí, no es
ninguna broma ni el día se los Santos Inocentes, el FMI con la elegante
Cristine Lagarde al frente, nos aconseja, como camino de salida al laberinto de
nuestra falta de empleo, que nos reduzcamos un 10 % nuestro sueldo. Qué curioso
que nos lo diga una señora que se aumentó su propio sueldo un 11% a su llegada
al FMI (2011) y que hable de ello desde una nómina de 325.000 euros al año. Y
nos lo dice a los españolitos de a pie, ¡a cuántos nos gustaría cobrar el 10%
de su sueldo!
Y, por si
fuera poca la gracia, va el Comisario Europeo para Asuntos Económicos y Monetarios,
el tal Oli Rhen, y se apunta al carro de las ocurrencias y nos pide lo mismo desde
un sueldo de más de 25.000 euros mensuales.
No podemos
olvidar que nosotros los hemos puesto ahí con nuestros votos. Así que debemos
ser nosotros, con nuestros futuros votos (mayo de 2014) quienes les limiten el
sueldo a una cantidad equivalente al sueldo medio, para utilizar el dinero
restante en políticas realistas de empleo, seguro que mejores que las que ellos
quieren subvencionar robándonos todavía un 10 % más.
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